YB, un carpintero de 30 años en un almacén de madera, se lesionó de nuevo la columna vertebral lumbar mientras levantaba un cubo de 50 libras lleno de cemento.  Inicialmente se había lesionado la espalda en 2003, resultando en una microdiscectomía L5-S1 para la ciática. Después de la cirugía, se recuperó bien y pronto volvió a sus tareas laborales habituales, descritas por el Diccionario de Títulos Ocupacionales en la categoría de trabajo pesado.

Después de lo ocurrido en febrero, YB fue visto por su antiguo cirujano.  Los estudios de resonancia magnética no mostraron un problema de disco.  Lo sacaron del trabajo, le recetaron medicamentos y le pusieron inyecciones.  Este régimen no logró aliviar su dolor e incapacidad y un año después se sometió a otra cirugía, esta vez una descompresión del nervio ciático derecho en la fosa piriforme, un procedimiento algo inusual.

La cirugía sólo tuvo un éxito parcial, y para junio de 2012, el cirujano envió a YB para una Evaluación de Capacidad Funcional, para determinar su capacidad de trabajo.  Los resultados de este examen concluyeron que YB era capaz de realizar un trabajo MEDIO-PESADO, pero no su anterior trabajo como carpintero que le exigía levantar regularmente 50 libras. Su cirujano le impuso una restricción permanente de 30 libras de levantamiento, que el almacén de madera se negó a acomodar.

Cuando un empleador se niega a acomodar las restricciones de trabajo ligero, el empleado lesionado tiene derecho a recibir las prestaciones por incapacidad total temporal (TTD) en forma continua.

La pregunta más importante que quedaba por responder era si existía un empleo actual para YB dado que había trabajado toda su vida adulta en el almacén de madera, no tenía educación secundaria, carecía de conocimientos informáticos, permanecía bajo restricciones laborales permanentes, no había trabajado en varios años y ahora tenía 62 años de edad. Para resolver esta cuestión, Lipkin & Apter contrató a un consejero vocacional especializado en la búsqueda de trabajo para trabajadores lesionados.

La conclusión del consejero: no había un mercado de trabajo estable para YB.  La compañía de seguros de compensación laboral contrató a su propio consejero vocacional, quien concluyó que había numerosos trabajos disponibles para YB. En la declaración de este consejero justo antes de que comenzara el juicio, admitió en el interrogatorio que no había hablado personalmente con ningún empleador para determinar si las calificaciones de YB coincidían con la oferta de trabajo, y que su estimación de que había trabajo disponible para YB se basaba simplemente en la búsqueda de listas de trabajo computarizadas.

En lugar de proceder a un juicio, la compañía de seguros de compensación laboral aceptó resolver la demanda de YB por 273,000 dólares.  Según la ley, un trabajador lesionado puede recibir tanto los beneficios de la Compensación Laboral como los del Ingreso por Discapacidad del Seguro Social.  Para recibir ambos, una persona DEBE notificar al Seguro Social de su caso pendiente de su Compensación Laboral. Habrá una ligera compensación (no dólar por dólar) de los beneficios del Ingreso por Discapacidad del Seguro Social (SSDI) a la luz de la Compensación Laboral, pero la combinación de los dos excederá la de cualquiera de los dos, por sí sola.  El convenio de liquidación de la indemnización por accidentes de trabajo tiene que emplear cierto lenguaje para no interrumpir la continuación de las prestaciones del SSDI.

Ser consciente de cómo la ley de Compensación Laboral y el Ingreso por Discapacidad del Seguro Social trabajan juntos es esencial para un resultado adecuado de su caso. Hacerlo optimizará su ingreso para proveer sus necesidades económicas a largo plazo. Si tiene alguna pregunta, por favor contacte a los abogados de compensación laboral de Lipkin & Apter para que le ayuden.